Buscando en la hemeroteca de El Pais en aquellos días tenemos las siguientes noticias:
- 17/06/1992 : "El Rey anula "por exceso de agenda" la recepción en el Campo del Moro"
"El motivo de esta anulación ha sido el "exceso de agenda" provocado por la coincidencia de acontecimientos como la Exposición Universal, los Juegos Olímpicos y los actos del Quinto Centenario, según informaron ayer fuentes del Palacio de la Zarzuela"
- 19/06/1992: "El Rey, en Suiza para someterse a un chequeo médico":
"El propio González confirmó el miércoles en el Congreso que el Rey no estaba presente en Madrid. Por ese motivo el presidente del Gobierno no despachó con él, como suele ser habitual, el martes. La audiencia de ese día, en la que probablemente González le hubiese comunicado el nombre del sustituto del titular de Exteriores, fue aplazada."
- 20/06/1992: "El Rey interrumpe unas vacaciones en Suiza para despachar con González"
"Fuentes de la Casa Real aseguraron en la mañana de ayer que el Jefe del Estado regresaría de su "viaje privado" el lunes próximo. A media tarde comentaron que el Rey se encontraba ya en Madrid, tras unas breves vacaciones en la montaña".
(...)
Fue el propio González quien reveló a los periodistas la ausencia de España de don Juan Carlos, al comentar, el pasado miércoles, que no había podido celebrar el habitual despacho de los martes en La Zarzuela porque don Juan Carlos no estaba.
(...)
Las vacaciones del Rey se han producido en la misma semana en que la Casa Real ha anunciado cambios en la celebración de su onomástica, el próximo día 24, debido a que la agenda de don Juan Carlos estaba sobrecargada.
El tema ha sido tratado en varios libros. En uno de los que se explica con más detalle es "Así es el príncipe" de José Apezarena:
"Todo empieza un miércoles, cuando el Presidente del Gobierno, en una sorprendente declaración, da a entender que no puede nombrar Ministro de Asuntos Exteriores, para sustituir a Fernandez Ordoñez, porque "el Rey no está".
Tan inusual afirmación, que parece dar a entender que ha salido de España sin informar al Gobierno, desata una lluvia de especulaciones. El diario "El Pais" dice que está en Suiza sometiéndose a un chequeo. Rosa Conde, el viernes, en la rueda de prensa del Consejo de Ministros, contribuye decisivamente a la sensación de que algo ocurre, con sus evasivas y torpes palabras cuando le preguntan por la ausencia de Don Juan Carlos.
La Casa Real desmiente la información de que el viaje se deba a cuestiones médicas, y da una razón puramente vacacional y de descanso.
El sábado, Don Juan Carlos está en Madrid, despachando con Felipe Gonzalez (...) pero ese mismo día vuelve a Suiza de nuevo. El lunes, Juan Balansó, en "El Mundo", alude a una "leyenda forjada dos años atrás en Mallorca" y cita a "alguna que otra gaya dama de lance pretendiendo secuestrar a nuestro buen Rey en la trastienda de un figón de chupinadas". En ese diario, Ricardo y Nacho dibujan una viñeta sin palabras en la que una dama (de evidente parecido con la Reina) espera en palacio a su marido, sentada en una silla con un rodillo en la mano."
Hasta aquí podríamos pensar que no se trata más que de un momento de relajación en la dura vida laboral de un monarca. Pero la cosa se complica un poco si aparecen documentos firmados en Madrid por el Rey en esas fechas en las que nadie podía localizarle. En el muy recomendable libro "Un rey golpe a golpe" firmado bajo el pseudónimo de Patricia Sverlo se comenta de la siguiente manera:
"Y la polémica no se detuvo. Por el contrario, unos cuantos días después El Mundo destacó que, como consecuencia de la escapada, se había incurrido en un presunto delito de falsificación de documento público. En efecto, según el BOE el rey había firmado una ley en Madrid (la sanción real de la ley de creación de la Universidad de La Rioja) el día que estuvo en Suiza (el 18 de junio). "O el lugar es falso, o la fecha es falsa o la firma es falsa", afirmaba El Mundo. Y además advertía que, aunque el rey no está sujeto a responsabilidad según la Constitución, el presunto delito se correspondía, atendiendo al Código Penal, con una pena de entre 6 y 12 años de prisión mayor."
No es posible acceder a El Mundo de esas fechas porque su hemeroteca digital en Internet comienza en 1994, pero si que es cierto que la ley existe y que fue "firmada" por el rey en esas fechas. Puede consultarse aquí.